A la hora de reformar tú baño, un elemento fundamental y que muchas veces no se le presta la debida atención es el lavabo. Antiguamente uno compraba un mueble para el baño junto con el lavabo y listo. Como en el resto de los elementos del baño, en los últimos años los fabricantes han hechos enormes avances en diseño y funcionalidad y hoy existen una amplia variedad de estilos, colores, formas, tamaños y precios de donde escoger. Aquellos días donde solo había 2 tipos de lavabo han acabado.
Si estas pensando en reformar tu baño; es primordial tener en cuenta el tamaño de tu baño y donde ira ubicado el lavabo para poder elegir el tamaño correcto de lavabo. A pesar de lo obvio de este consejo, nos hemos encontrado más de una vez, que aunque el lavabo elegido encaja en el sitio designado a tal efecto, ha entrado tan justo que apenas queda espacio para el toallero o para poder limpiar con comodidad.
El otro tema a tener en cuenta es que tipo de lavabo prefieres o te gusta más. Existen diferentes opciones que se ajustan mejor a un tipo de baño que otros y la correcta elección de tu lavabo harán que baño sea un sueño o una pesadilla. Por ello te damos algunas opciones que serán de gran utilidad a la hora de pensar el diseño de tu nuevo baño.
Lavabo mural o suspendido
Este tipo de lavabo está diseñado para ir fijados a la pared sin ningún tipo de soporte adicional, excepto las fijaciones necesarias a tal efecto. Es una opción ideal para aquellos baños pequeños muy necesitados de espacio, o para aseos. Este tipo de lavabo permite tener gran cantidad de espacio vacante en tu baño dando la sensación de amplitud de tu baño.
Además los modelos disponen de toalleros adaptables al lavabo que le aportan carácter y funcionalidad. Y junto con los complementos, hoy en día existen gran variedad de Sifones de diseño que una vez instalados harán resaltar aun más tu lavabo.
Sin embargo este tipo de lavabos los debes evitar si tienes niños en casa. Los niños suelen colgarse para alcanzar el lavabo y a pesar de ser resistentes y estar diseñados para soportar peso, es muy probable que con el paso del tiempo terminen por dañarse.
En el caso de tener un baño pequeño y tener niños en casa, la solución es colocar una estructura debajo del lavabo, lo que le aportara resistencia y soporte adicional y además ganaras en espacio de almacenaje sin que ello signifique la pérdida de sanación de amplitud.
Lavabo con mueble incorporado
Si tu baño es grande, la opción ideal es un lavabo con mueble incorporado. Existe una gran variedad opciones del conjunto lavabo más mueble, sin embargo lo podemos dividir en 2 grandes grupos
- Lavabo con mueble incorporado
Este tipo de lavabo, cubre la totalidad de la superficie superior del mueble y va encastrado en el mueble, son los de toda la vida, aunque en los últimos años han tenido una evolución considerable. Son duraderos, fáciles de limpiar y funcionales; sin embargo son los más comunes.
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Lavabo sobre encimera
Este formato, el lavabo va colocado sobre la superficie del mueble. Estéticamente son muy bonitos, aunque presentan cierta incomodidad a la hora de la limpieza de la superficie. Además hay que tener en cuenta la grifería, ya que necesita un modelo de caño alto.
Si estas pensando en reformar tu baño en Barcelona y necesitas un presupuesto, llámanos, estaremos encantados de ayudarte.